¡Hola! amigos de Menua Ruta:
Este pasado sábado día 7 de noviembre hicimos una ruta, muy esperada por algunos de nosotros, que no defraudo en nada por su belleza y espectacularidad, aunque también deparó alguna sorpresa.
Sobre las nueve de la mañana llegábamos al punto de salida, justo en la intersección de la RM-314 y la RM-F42 pasada la entrada a la Manga Club. Rápidamente nos poníamos en marcha, tomando la carretera que lleva a la bahía de Portman durante unos quinientos metros, giramos a la izquierda para adentrarnos en el Barranco del Moro, donde inmediatamente nos encontramos con los restos de una Calzada Romana. La zona es preciosa pero no estamos solos, como en la película "La Marabunta", pero en vez de hormigas los protagonistas era mosquitos, no se que variedad: si tigres, si leones, si elefantes, etc., lo que si puedo asegurar es que picaban como salvajes, con una ferocidad brutal, produciendo unos habones que en algún compañero rozaba la reacción alérgica.
Calzada Romana:
Serpenteante camino cuyo origen se remonta a la época romana. Con el resurgimiento de la minería experimentado en el siglo XIX permite la vuelta al uso de esta calzada de modo que los restos conservados corresponden predominantemente a esta época. Se trata de un ramal de la
Vía Augusta que unía Cartago Nova y Tarraco (Tarragona). Fue un punto principal de enlace con el mar menor.
A los dos kilómetros, dejamos el Barranco del Moro y salimos a la carretera en dirección a la bahía de Portman. Aunque no desaparecieron totalmente, los mosquitos estaban concentrados en esta zona del Barranco, haciendo interminable este tramo. Antes de entrar a la había, giramos a la izquierda para llegar al Faro de Portman, donde también se encuentra la
batería de La Chapa. Las vistas de la bahía, el mar y todo el entorno son espléndidas.
Batería de la Chapa:
El gobierno de Primo de Rivera aprobó el Plan de Defensa de 1926, por el que se realizó un despliegue defensivo estableciendo unas poderosas baterías agrupadas en diversos puntos del litoral cartagenero, que podían mantener a raya una escuadra enemiga a varias decenas de kilómetros de las aguas portuarias cartageneras. Los cañones que caracterizaron este plan defensivo fueron los de la marca británica Vickers.
La batería de la Chapa formó parte del complejo defensivo establecido en el monte de Cenizas. Se montaron cuatro cañones de 152,4 mm en 1930, que quedaron operativos a finales del año siguiente. Al igual que otros punto militares de Cartagena, tuvo un papel relevante en el conflicto civil que estalló poco después (1936-1939). Sin embargo, conforme avanzaron los años fue perdiendo valor estratégico en el conjunto de las defensa de Cartagena, hasta que quedó fuera de servicio en 1994. (Fuente Región de Murcia digital).
Continuamos la marcha bordeando la costa y tras recorrer unos tres kilómetros cuyo último kilómetro tiene una pendiente muy severa y prácticamente no se identifica la senda, llegamos a la cima del Monte de las Cenizas donde podemos encontrar las primeras instalaciones militares de la
batería de las Cenizas: nidos de ametralladoras, almacenes para los proyectiles y cargas, barracones para los soldados, etc. Separados de estas instalaciones, a unos quinientos metros, y en el punto más alto a 360 m de altitud, se encuentra dos baterías con dos cañones espectaculares por su tamaño. No hay que decir cómo son las vistas desde este lugar...
Batería de las Cenizas:
La batería de Cenizas fue construida entre 1930 y 1934, conforme a los proyectos surgidos tras la aprobación por el gobierno de Primo de Rivera del Plan de Defensa para Bases Navales de 1926. Desde este punto se cubría buena parte del litoral cercano a la base naval. Allí se emplazaron dos cañones cuyo tubos tiene más de 17 m de longitud, fabricado por la casa británica Vickers-Amstrong en su factoría de Sheffield, que podían disparar un proyectil de casi una tonelada a 35 kilómetros de distancia. Era uno de los materiales artilleros más modernos y eficaces de la época, y su montaje y construcción dió lugar a una importante serie de trabajos, como construcción de carreteras, voladura de montes, etc., que dieron trabajo a multitud de personas. Quedó fuera de servicio en 1994. (Fuente Región de Murcia digital).
En estas baterías decidimos parar y tomar algo para reponer fuerza, unos con fruta pero otros con un almuerzo monumental, preguntarle a Dani.
Llevamos 6 kilómetros recorridos y nos ponemos en marcha. El resto de recorrido es en suave descenso, inicialmente por la costa disfrutando de unos acantilados y del mar, para enseguida tomar en dirección al interior hasta llegar al punto de salida.
Una ruta muy bonita, hermosa, preciosa, pero que los mosquitos la deslucieron un poco.
Como siempre, las fotos están subidas y las podéis ver en
el apartado de "Galería de fotos" y a continuación tenéis los
datos cartográficos y técnicos de la ruta. También el acceso a Wikiloc.
Un
fuerte abrazo, disfrutar del Blog y que la semana vaya bien.
José
Pozuelo.
FICHA TÉCNICA DE LA RUTA
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Portman – Monte de las Cenizas
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Distancia
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10 Kilómetros
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Altitud
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Mínima: 60 metros
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Máxima: 360 metros
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Desnivel acumulado
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Subiendo: 307 metros
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Bajando: 307 metros
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Dificultad-Dureza
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Baja- moderada en
algún tramo
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Tiempo total
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4 horas, 6 minutos.
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Incluido el
almuerzo.
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Velocidad media
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2,43 km/h
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Tiempo
movimiento
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3 h. 39 min. 51
seg.
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Ritmo
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24:39 minutos el
kilómetro.
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Fecha
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7 noviembre de 2015
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Ruta Señalizada
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No
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Ruta circular
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Sí
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De interés
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Muy bonita. Espectacular
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Valoración (1)
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* * * * * (1) 0 No aconsejable - 5 Para repetir
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