Ha sido la mas bonita de las rutas que hemos hecho hasta ahora, tantos años pasando cerca, tantos años de crios jugando por las cercanías, algunos recordaban tiempos de su niñez, haciendo de monaguillo en el convento de las Carmelitas Descalzas, recordaban senderos, sitios, rincones, etc.
Esta ruta, fue preparada por PABLO y para nosotros era una incógnita, pues nunca sabemos por donde nos va a meter, pero merece la pena seguirlo, incluso aún cuando nos equivocamos de camino, él siempre pendiente de nosotros, nos cuida, nos mima, ya conocéis a Pablo, es AUTENTICO.
El barranco del Sordo, está localizado en el Parque Regional de El Valle-Carrascoy, nace al pié del Pico del Relojero (603 mts) y termina pasando por Santo Ángel hasta la acequia de Beniaján.
El día acompañaba, estaba nublado y hacía buena temperatura, la tierra estaba húmeda, solo nos faltabas tú,
echamos de menos cuando falta alguien.
Comenzamos desde
la Fuensanta descendiendo por una pequeña rambla, llena de arbustos y olivos,
hasta la primera muralla donde se encuentra la fuente del agua, ahora seca,
recordábamos cuando éramos pequeños,
las veces que habíamos corrido y jugado por los alrededores
y en la fuente,
tras las correspondientes fotos, comenzamos por el sendero en el que en
otros años
nos sentábamos con la familia a ver la subida de
la Virgen,
llegamos al convento y giramos hacia la rambla,
impresionante las paredes de la misma casi en vertical,
cogimos un sendero por su margen izquierda,
se veían los restos de antiguas construcciones de canales para el agua, contrraparadas, muros, etc. alguna tubería de cerámica, etc.
no olvidemos que esta rambla con sus ramificaciones es uno de los puntos más húmedos del Parque y lo utilizaban para recoger sus aguas para la población
y
para el riego a través de la acequia de Beniaján.
Seguimos ascendiendo, parecía que estábamos en el norte si no fuera por que los pinos carrascos son más de esta zona, se olía la tierra, el romero está empezando a florecer, cuando rozabas alguno, ese olor de monte, caminábamos cerca de la carretera y era impresionante, como te das cuenta de lo que tenemos cuando dejas el coche y caminas, lo que antes parecía lejano, ahora das tres pasos y lo alcanzas, lo que antes parecía grandioso ahora es una nimiedad comparado con la naturaleza, lo que antes parecía importante ahora es irrelevante, por que lo importante sois vosotros, las personas con las que compartimos nuestra vida, esos momentos pequeños, ese apretón de manos, vuestro abrazo, vuestro calor, pensad un momento, esa paz, acaso no sentís como se ensancha vuestro pecho?, la importancia de vuestro abrazo, probadlo con otras personas, incluso aunque no se den cuenta, será algo maravilloso para ti.
Recorremos el fondo del barranco pasando por debajo del puente, hasta conectar con la carretera de
Los Teatinos, donde según dicen
se pueden observar varias construcciones singulares, un pozo artesiano, una antigua cantera de yeso y una conducción de aguas procedentes del Espíritu Santo y atravesamos
la Cañada Real de Torreagüera a la altura del Eremitorio de
La Luz.
El tramo mas complicado y duro está por empezar que llega hasta la base del Relojero pasando por las Minas del Cerrillar, que en esta ocasión algunos entraron, este tramo es muy escarpado, vamos que andábamos casi de puntillas, subida, parada, ánimos, que cuando almorzamos, ya sabes, cada vez vamos un poco mejor físicamente (esto vá por mí) y no retenemos tanto al grupo, que siempre nos espera, siempre están ahí para ayudarte.
Hasta la naturaleza parece que nos acompañaba, esos caminos estrechos por el borde del barranco, te tienes que agarrar en ocasiones a la pared para no caerte, como premio y por unos momentos, salió el sol, teníamos que mirar hacia arriba para verlo entre las ramas de los árboles, sentir como nos acariciaba, como parecía que iluminaba el camino, la quietud, la calma nuestra paz.
Por fin la hora del almuerzo, subidos a una peña en el cruce de caminos, lo divisábamos casi todo, toma de lo mío, dame eso, todos compartiendo el momento y los alimentos que portábamos.
Creíamos que la aventura terminaba,
nada mas lejos con
Pablo,
nos pusimos en marcha, cogimos un tramo de pista y pronto nos salimos, estábamos ya en el descenso,
que paraje mas bonito, lo están repoblando y entramos en otra rambla,
otra vez senderos estrechos
de los que nos gustan,
has visto que árbol y
esos matorrales,
guau, que rincón mas bonito,
no te puedes despistar
o caes,
hasta el color de la tierra, amarilla, blanca o lila,
llegamos a
la Casa del Sequen y volvimos a meternos en otra rambla, hasta que llegamos al Eremitorio de
La Luz,
por mayoría decidimos
seguir por la carretera,
pues algunos tenían prisas,
llevábamos más de 4 horas caminando y se notaba el cansancio,
como siempre el último tramo casi en silencio, volvíamos otra vez a la realidad, los horarios las prisas, el trabajo, etc.
Repito que para mí, la ruta mas bonita que hemos hecho, no me daría cuidado volver a hacerla de nuevo de hecho quizás un Domingo de estos haga parte de ella, me sentí bien, espero que sintierais parte de lo que yo sentí, de lo contrario tendrás que repetirla o no estábamos en el mismo sitio, me sentiré feliz si algo de lo que os he contado te ha hecho recordar y sentir algo de aquel día.
Saludos,
Antonio Ros
P.D.
Ya sabeis, la fotos de la ruta la podeis ver pulsando en las fotos que aparecen en la derecha "galerias de fotos" y seleccionando el albúm de la ruta.